¡Qué ilusión arrancar con el sueño de tener negocio propio! Sin embargo, más allá de quedarte con la emoción, debés empezar a ejecutar pasos clave para cumplir tus metas, y uno de esos, quizá el más tedioso, es realizar los trámites importantes para iniciar. Te compartimos 3 pasos con esos detalles que no podés pasar por alto para iniciar la ruta que te llevará a la primera victoria del emprendimiento:
Ponerle nombre a tu negocio es una parte importantísima para la construcción de tu marca. Tomá el tiempo que necesités para realizar la elección correcta, para que cuando lo escuchés en otros, confirmés que ese era. Una vez que encontraste el indicado, parte del proceso también es revisar la disponibilidad; por más creativo que seás, puede que te llevés la sorpresa de que otra empresa ya lo tiene. Para eso, debés revisar en la base de datos del Registro Nacional. La consulta es gratuita y la podés realizar de manera sencilla en la página de esa entidad.
Pensá en tus necesidades, para que podás elegir la figura que más te conviene según tu negocio y tu actividad. Las que más se utilizan en el país son la Sociedad Anónima, y la Sociedad de Responsabilidad Limitada, cuya diferencia radica en la responsabilidad que tienen los accionistas sobre estas. La constitución de la empresa se hace por medio de un notario público.
Debés estar al día o no tener deudas con la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS). Si nunca has tenido ningún tipo de relación con esta institución, debés registrarte como persona trabajadora independiente, patrono o ambos. Después de presentar los documentos, la CCSS te entregará un formulario de registro que te habilitará para funcionar; posterior a esto, se realiza una visita de fiscalización, para verificar la veracidad de la información presentada.
Para comenzar operaciones, también debés cumplir con el registro único de contribuyente ante el Ministerio de Hacienda. Es un paso sencillo y casi inmediato, al crear una cuenta en el portal de ATV de esa entidad, a través del siguiente enlace:
Es importante tomar en cuenta que la inscripción se puede llevar a cabo de dos formas: Régimen Tradicional o Régimen Simplificado. Este último es un régimen especial para ciertas actividades empresariales, orientado a empresas pequeñas.
Otro paso importante es verificar si la actividad que vas a desarrollar requiere de permisos municipales, al tener un local físico en donde operará la empresa. Para solicitar la patente, debés, de forma previa, haber solicitado el uso del suelo en la municipalidad respectiva y haber gestionado el permiso sanitario del Ministerio de Salud en el Área de Salud Local.
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