Un préstamo personal es una cantidad de dinero que te presta una institución financiera, la cual debés pagar de vuelta en un periodo establecido, con un porcentaje adicional correspondiente a intereses. Ese dinero podrás utilizarlo para cubrir ciertas necesidades personales, tales como salud, educación, compra de artículos, entre otros.
Te compartimos 3 detalles que debés tener en cuenta antes de tomar esa decisión que te resolverá muchísimas necesidades:
El uso que le darás o el destino de ese dinero es relevante al tomar la decisión. Debés tener claro qué necesidad vas a cubrir. Podés utilizar un préstamo personal para:
Te recomendamos prestar atención a tu capacidad de pago antes de solicitar un crédito, para que sepás si calificás o si requerís tomar acciones para mejorarla. Investigá las tasas de interés que se ofrecen para este tipo de préstamo. Con ese dato, podés conocer la cantidad de dinero adicional que vas a desembolsar cada mes y realizar tus propios cálculos. O bien, te facilitamos una calculadora de préstamos personales, que hará el trabajo por vos:
Calculadora de gastos personales
Para tener una buena salud financiera, lo ideal es que tus deudas no superen el 50% de tus ingresos mensuales. Lo recomendable, en realidad, es que no superen el 30%. Tené esta información siempre presente. Lo que se busca es que no te sobrendeudés, podás pagar a tiempo y vivás con mayor paz y tranquilidad.
En el siguiente enlace te contamos todos los detalles en los que nos fijamos los bancos antes de otorgar un crédito:
Guía fácil para ser mejor sujeto de crédito
Siempre es mejor, en estos casos, buscar instituciones reguladas por SUGEF, que son las fuentes formales para estos trámites. Algunas de ellas son bancos, cooperativas, mutuales, etc. En estas instituciones suelen tardar unos días para confirmarte si sos sujeto de crédito o no. No obstante, existen algunas entidades que te ofrecen “dinero rápido” y sin necesidad de muchos requisitos ni garantías, tené mucho cuidado con esos créditos, ya que te podría salir más caro y hasta resultar imposibles de pagar, pues los intereses o comisiones suelen ser más elevados que en otras instituciones.
Ahora que ya tenés claros estos detalles, podés dejarnos tus datos en el siguiente enlace para que uno de nuestros asesores pueda convertirse en tu orientador a la hora de solicitar un préstamo personal:
Quiero que me contacten