¡El dinero no tiene por qué ser un monstruo tenebroso! Hablales de finanzas, contales qué son gastos, ingresos, deudas, cómo ahorrar y cómo pagar a tiempo. Esto les permitirá convertirse en adultos responsables y les ayudará a fortalecer su seguridad al momento de utilizar su dinero.
Es súper importante también que comprendan de dónde viene el dinero, que se debe trabajar para conseguirlo y que con él debemos pagar otras cosas más allá de lo “divertido”, como la comida, la casa, la luz o la educación. Deben saber que los cajeros automáticos no son aparatos que mágicamente generan dinero.
Explicales los beneficios que les traerá ahorrar dinero. Establezcan una meta, puede ser un juguete o un paseo, y explicales la importancia de guardar dinero para alcanzarla.
No es que el dinero los vaya a hacer más felices, pero ahorrar y tener finanzas personales sanas les permitirá ser independientes y que su vida sea más ordenada.
¡Nada como los juegos para aprender el valor del dinero! No hay edad para la emoción que genera cumplir un sueño, así que despertar esa ilusión facilitará el trabajo y sobretodo si es a través de juegos.
Lograr las metas puede ser un reto divertido. Los niños encontrarán el valor del ahorro cuando se les asignen tareas y con ello reciban una cantidad de dinero. Es importante que sepan, además, cuánto tiempo les tomará ahorrar para el fin que están buscando. Recordemos que el objetivo de entregar cierta cantidad de dinero a tus hijos es enseñarles la importancia de gestionarlo correctamente, y no simplemente hacerlo por compromiso, por sus buenas notas o como premio.
Hoy en día, existen apps que les permiten a tus hijos aprender acerca del dinero; no obstante, pasar una tarde jugando Monopoly puede ser una gran idea para que toda la familia lo disfrute.
Si sos de las personas que gasta montones e inclusive más de lo que debería, difícilmente tus hijos van a tomar en cuenta tus consejos. Como padres y tutores de nuestros hijos, debemos darles el ejemplo de las finanzas en casa.
Buscá la forma de incluirlos en el desarrollo del presupuesto familiar (ya sea semanal, quincenal o mensual). Si no suelen hacer uno, este es un buen momento para comenzar.
Cada vez que vayás a hacer una compra compulsiva, empezá por hacerte la pregunta ¿realmente lo necesito? Una vez que tengás esto dominado, aplicale la misma pregunta a tus hijos. Buscamos que los niños entiendan que a veces se debe esperar para adquirir algo, por mucho que se quiera, porque existen prioridades.
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El banco no es un tema solo de adultos; por el contrario, debés verlo como un aliado para los más pequeños de la casa. Llevarlos a una oficina del Banco y abrirles una cuenta juvenil es una opción para que inicien sus finanzas de forma ordenada y segura. También la podés abrir en línea junto a ellos:
En el momento en que tienen su tarjeta y pueden administrar su propio dinero, van a ser más independientes y tendrán mayor seguridad en sí mismos. Arrancá por uno de estos 5 tips y hacé la diferencia en la vida de tus hijos.
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